Por: Martin Arce
Un Ídolo Latino por excelencia dentro y fuera de escenario
El pasado mes, la ciudad del Sol, la ciudad del eterno verano, la ciudad donde las culturas confluyen y se hacen Una, la bella y única ciudad de Miami, tuvo el privilegio y el honor de recibir a un ídolo, de corazón Hispano, al Gran Tenor, al Gran Maestro Placido Domingo, cualquier presentación resultaría insuficiente para expresar la magnitud de este grandioso evento. Este apoteósico y multitudinario concierto deleito a la audiencia del American Airlines Arena, donde también estuvo el gran cantautor colombiano Juanes, quien canto con el Maestro canciones del repertorio Latinoamericano, para finalizar con Rancheras y Mariachis, celebrando la vísperas del cumpleaños del Gran Tenor.
” El Granado” como lo apodaron sus familiares desde pequeño por gustarle cantar la emblemática composición del Gran músico Mexicano Agustín Lara, “Granada”, revelaría desde temprana edad su brillante y valioso destino , al convertirse en uno de los cantantes más reconocidos de la lirica internacional , recorriendo todos los escenarios importantes del mundo, interpretando extraordinariamente operas y composiciones en varios idiomas : Italiano, portugués, español, Francés, Ruso y Alemán, así como el cancionero latinoamericano al que le otorga una especial sensibilidad que revela su profundo afecto por lo Hispano.
Placido Domingo posee una versatilidad lirica admirable, ya que en sus inicios, debuto primero como barítono interpretando a “Pascual”en la obra “Marina” poco después debutaría también como tenor, esta vez como “Alfredo” en la Traviata de Verdi, aptitudes que sumadas a su extraordinaria capacidad histriónica en el proscenio reflejan su carisma cautivante.
Este afecto por lo hispano y su inclinación musical, no serian casuales, Placido Domingo, emigro con sus padres de su natal Madrid España a la ciudad de México, a la edad de 8 años donde desarrollaría sus estudios musicales, Piano y Dirección de Orquesta, en la Escuela Nacional de Artes y en el Conservatorio Nacional de Música, asimismo su filiación musical, herencia de sus padres, los famosos cantantes de Zarzuela Española, Don Placido Domingo Ferrer y Pepita Embill, a quien cariñosamente el pueblo mexicano la idolatrara como ” La Reina de la Zarzuela Mexicana”, quienes realizaron exitosas giras por Latinoamérica, con las clásicas obras de la zarzuela “Luisa Fernanda” y ” La tabernera del Puerto”, cuya influencia marcaria indudablemente el abolengo lirico del Maestro.
Un Ídolo con corazón…. la presencia lirica del Gran Placido Domingo, sin lugar a dudas, constituye uno de los símbolos artísticos mas grandes de los últimos tiempos, con acontecimientos que han marcado historia … como el de romper el record de aplausos del público por 80 minutos, en la ciudad de Viena en 1991 por su actuación en Otelo de Verdi, donde Placido salió 101 veces al escenario para agradecer la ovación del Publico, marca registrada por el libro Guinness, superando al alcanzado por otro grande de la lirica mundial Luciano Pavarotti, el cual diría de Placido en una entrevista ” Si me invitaras a cenar y, para agradarme, pusieras una grabación mía antigua, te dejaría plantado de inmediato. Si quieres que me quede, hazme oír la voz de Plácido”.
O al superar el Record del Gran Enrico Caruso al abrir la temporada de la Metropolitan Opera de New York, en veintiuna ocasiones, o al haber reunido a 400,000 personas en Central Park en un concierto a pesar de la lluvia, entre otras innumerables distinciones ha sido nombrado Director artístico de la Opera Nacional de Washington y de la Opera de Los Ángeles Paralelamente sus éxitos artísticos van de la mano con sus cualidades personales, caracterizado por un corazón noble y generoso, su espíritu altruista ha contribuido a aliviar el dolor humano frente a los infortunios, durante el terremoto en México de 1985, Placido Domingo participo personalmente en las labores de rescate, durante un año dio conciertos benéficos para las víctimas, uno de los más importantes fue en la ciudad de los Ángeles, el llamado concierto “Placido y sus amigos ” donde El Gran Tenor reunió a Frank Sinatra, Julie Andrews, John Denver y el grupo Pandora.
En 1990 en Roma conformo la célebre sociedad de los “Tres Tenores” , evento concebido para reunir dinero para la Fundación Internacional contra la Leucemia, junto a Luciano Pavarotti y José Carreras, este último quien había sido víctima de esta enfermedad.
En 1993 fundó “Operalia” concurso para apoyar a jóvenes cantantes de Ópera.
En 1997, para las víctimas del Huracán Paulina que devasto el Puerto de Acapulco, en el estado de Guerrero México, destinó las ganancias de un año y regaló casas a familias sin recursos, se edificaron miles de viviendas que la constructora diseñadora bautizo con el nombre de “Placido”
El Gran Tenor, el Gran Placido Domingo, encarna sin dudas, la figura de un Ídolo real y humano, un orgullo y ejemplo para el mundo y en especial para toda la comunidad de
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